Las taulas, santuarios únicos en el mundo

Tres construcciones de la prehistoria menorquina cuentan con el privilegio de ser únicas en el mundo: los talayots, que dan nombre a la cultura talayótica, las navetas de enterramiento y las taulas.

Éstas últimas son, de hecho, uno de los monumentos más venerados de la Menorca Talayótica, declarada Patrimonio Mundial de la UNESCO. Se han llegado a documentar 32 ejemplos de este tipo de construcción ritualista, de los que solo una decena se mantienen en pie.

Las taulas, elementos centrales de los poblados talayóticos

Las taulas ocupan el centro de los recintos de taula o santuarios, espacios en forma de herradura cerrados por muros ciclópeos con pilastras. Este tipo de elemento constructivo se remonta al 600 a.C. y tiene la particularidad de presidir un espacio exclusivo en los poblados talayóticos.

Las taulas están formadas por dos grandes losas rectangulares sorprendentemente apiladas: una, en posición vertical, que sirve de soporte y, otra, colocada a modo de mesa y llamada capitel. 

A diferencia de los talayots, solo aparece un recinto de taula en cada poblado, a excepción del santuario de So na Caçana, donde se han documentado dos. 

Tanto su forma original como su uso religioso son todavía motivo de discusión. Algunas hipótesis apuntan a que las taulas eran las pilastras centrales de los recintos, que ayudarían a sostener un techo monumental formado por vigas de madera y elementos vegetales. Pero también se cree que tiene solo una función simbólica y que vendría a representar un emblema a las divinidades con una estructura descubierta. 

Los objetos que se han encontrado en los recintos, como una figurita de bronce que representa un toro en Torralba d’en Salort o una de Imhotep en Torre d’en Galmés, son pistas que ayudan a pensar en la importancia religiosa de estas construcciones.

A continuación, enumeramos las taulas más espectaculares de la Menorca Talayótica.

Las taulas de mayores dimensiones

TORRALBA D’EN SALORT
La taula, de una talla perfecta, es el elemento arquitectónico que más personalidad aporta al poblado de Torralba d’en Salort. Más allá de su magnitud —alcanza los 4 metros de altura— sorprende por su forma armoniosa, que todavía hoy plantea ciertas cuestiones no resueltas sobre el pasado menorquín. Incluso abre camino a nuevas hipótesis como la defendida por los arqueológos Irene Riudavets y Antoni Ferrer que apunta a una representación simbólica de unas puertas que, conceptualmente, serían la entrada al más allá.

TREPUCÓ
Con la taula del poblado de Trepucó, una de las más grandes de Menorca, seréis testigos no solo del paso del tiempo, sino de la evolución técnica de la arqueología. El recurso estrella del equipo de excavación de Margaret Murray, cuando realizó las primeras intervenciones en los años 30 del siglo XX, fue el cemento. La taula de Trepucó se excavó en exceso hasta necesitar un contrapeso de cemento que evitase una grieta definitiva. Así que si hablamos de que se trata de una de las taulas más grandes de Menorca es, en parte, porque se excavó demasiado… Aún así, a Murray sí se le debe reconocer la aplicación por primera vez de un método de excavación científico y no una mera recolección de piezas del legado prehistórico. 

Las construcciones más singulares

TALATÍ DE DALT
Es curioso ver cómo prácticamente todas las taulas que han llegado hasta nuestros días tienen algún rasgo característico que las distingue de las demás. En el caso del poblado de Talatí de Dalt, una de las pilastras laterales cayó y quedó apoyada en el capitel de la taula. Este hecho, puramente casual, acabó configurando un monumento único en la isla y convirtió Talatí de Dalt en uno de los poblados de mayor interés, en gran parte por la diversidad de elementos arquitectónicos prehistóricos que han llegado a nuestros días..

TORRETRENCADA
La taula del poblado de Torretrencada también se diferencia del resto por tener una columna de refuerzo en la parte posterior. Es considerada una de las más imponentes de la prehistoria menorquina por esta singularidad constructiva. Desgraciadamente, el recinto que la circunvalaba está prácticamente desaparecido.

SA TORRETA DE TRAMUNTANA
Cambiamos de paisaje para visitar uno de los pocos yacimientos ubicados en la costa norte de Menorca. A diferencia del resto, las dimensiones del recinto de taula, en perfecto estado de conservación, son más bien pequeñas. En él, la arqueóloga Margaret Murray documentaría por primera vez restos de fuego, huesos de animal y ánforas de vino que probarían el uso ritualista del santuario.

BINISSAFULLET
La taula del poblado de Binissafullet, habitado entre los siglos X a.C. y la época romana, estaba caída hasta que se restauró y enderezó en 1990. La singularidad de esta taula se debe a que la pilastra y el capitel descansan sobre una base y no directamente sobre la roca o encajada en ella, como ocurre en el resto de yacimientos.

Las taulas menos conocidas de la Menorca Talayótica

TORRELLISAR VELL
Ubicada en la finca de Torrellisar, en Alaior, la taula se conserva en buen estado escondida por una pared seca moderna de más de dos metros de altura. Las pilastras laterales del recinto original han quedado insertadas dentro de este muro. Del poblado, que debió de tener unas dimensiones considerables, no queda prácticamente nada. 

TORRELLAFUDA
¿Por qué incluimos la taula del poblado de Torrellafuda entre las menos conocidas? Pues porque erróneamente se identifica como taula lo que en realidad es una pilastra lateral del santuario, que aún conserva el capitel. La taula real está caída, con la piedra de apoyo rota por la mitad.

Si te interesa la prehistoria menorquina, te invitamos a visitar la página dedicada a la Menorca Talayótica donde podrás indagar sobre las características y curiosidades de los principales yacimientos, así como otros contenidos de interés. El sitio oficial donde podrás consultar toda la información relativa a la cultura prehistórica menorquina es menorcatalayotica.info.