Qué ver en Es Migjorn Gran: de ruta por el pueblo del folklore menorquín

En Es Migjorn Gran se respira la esencia de Menorca. Es un lugar de tradiciones, tranquilo, en el que el tiempo parece haberse detenido.

Este pequeño municipio del sur de la isla presenta una curiosa paradoja: es, a la vez, el pueblo más joven y el más longevo de Menorca. El más joven porque se independizó de Es Mercadal y se constituyó como municipio en 1989, y el más longevo porque no es raro que sus vecinos superen los cien años de vida. El caso más paradigmático es el de Joan Riudavets Moll que en el 2004 se convirtió en el hombre más longevo del mundo con 114 años –y hasta los 110 paseó en bicicleta por el pueblo!

De Es Migjorn también es hijo Francesc de Albranca, médico, erudito, arqueólogo, folclorista y uno de los intelectuales más importados de la historia contemporánea de Menorca. Os invitamos a dar un paseo por este pequeño gran pueblo…

El encanto de las calles de Es Migjorn Gran

EL CENTRO HISTÓRICO
Desde hace unos años, los migjorners se han sumado a la tradicional moda del sur español y dejan sus ramellets y plantas en el exterior de las casas. Esto hace que algunas calles del centro, además de comulgar con la blancura mediterránea, luzcan un estampado de colores vivos. Cuatro calles van a parar al Pla de l’Església y todas transmiten quietud y reposo. Andando un poquito encontraréis el Bar Peri, un auténtico «bar de pueblo».

IGLESIA DE SANT CRISTÒFOL Y REFUGIO ANTIAÉREO
El primer centro de culto de Es Migjorn Gran se encontraba cerca de Binicodrellet, donde aún hoy se conservan los restos de un asentamiento rural de época romana. El templo actual, en cambio, es de 1768. El edificio, formado por una nave única y capillas laterales comunicadas, presenta una gran sencillez arquitectónica. Justo en la salida de la iglesia se encuentra el acceso en el refugio antiaéreo construido durante la Guerra Civil. En verano se hacen visitas guiadas.

Alrededores del pueblo

SANT AGUSTÍ VELL
Cerca de Es Migjorn Gran encontramos uno de los poblados talayóticos más grandes de Menorca: el poblado de Sant Agustí. Este yacimiento es conocido por la singularidad de uno de sus talayots, que todavía conserva en su cámara interna el envigado de madera de olivo original. Sin duda, una de las discretas maravillas de la arqueología prehistórica menorquina.

BARRANCO DE BINIGAUS
En el litoral de Es Migjorn Gran desembocan diferentes barrancos; algunos de ellos, ruta habitual de senderismo. El caso más paradigmático es el del barranco de Binigaus. A lo largo del itinerario encontramos algunas cavidades espectaculares, como la Cova des Coloms, la cueva natural más grande de Menorca y la Cova de na Polida, cerrada al público para proteger las formaciones de estalactitas y una especie de murciélago en peligro de extinción. Al inicio de la ruta también encontraréis la sala hipóstila de Es Galliner de Madona, uno de los mejores ejemplos que se conservan de este tipo de construcción prehistórica.

Playas y calas vírgenes

DE TREBALÚGER A BINIGAUS
En el término municipal de Es Migjorn Gran se encuentran algunas de las playas y calas vírgenes más impresionantes de Menorca. La primera, Trebalúger, playa paradisíaca, de arena blanca y fina y aguas de color turquesa, que está situada al final del barranco del mismo nombre. A continuación, Fustam y Escorxada, dos calas vírgenes aisladas de difícil acceso (45 minutos a pie desde Binigaus) y de características similares a la anterior. Y, por fin, Binigaus, la playa más grande del municipio, próxima a las urbanizadas Sant Adeodato y Sant Tomás.