Barranco de Algendar

El barranco de Algendar, de gran belleza natural y paisajística, es el accidente geográfico más importante del altiplano miocénico del sur de Menorca. Nace en la región de tramontana y marca de una forma natural el límite entre los términos municipales de Ferreries y Ciutadella.

La riqueza de la fauna y la flora de Algendar, con algunos endemismos propios, ha configurado su territorio como una reserva natural de gran valor ecológico. El clima húmedo hace del barranco de Algendar un hábitat ideal para muchas especies vegetales y animales prácticamente ausentes en el resto de la isla.

Está formado por profundos cañones fluviales, con paredes verticales y desniveles que alcanzan casi los cien metros. El paso del torrente –uno de los pocos con curso de agua permanente todo el año– describe numerosos meandros hasta desembocar en Cala Galdana, llegando a dibujar un trazado de gran recorrido que en línea recta llegaría a una longitud de 6 km, con anchos que van de los 50 a los 100 m.

De tierra fértil, cultivado desde la antigüedad como zona de hortales, se pueden distinguir aún hoy testimonios de la cultura árabe, como las canalizaciones para regadío o los aljibes.

El Pas d’en Revull

El Pas d’en Revull es un paso interior esculpido de forma natural en la piedra, que desde hace siglos ha funcionado como vía de acceso al barranco de Algendar desde el Camí Reial.

Tiene un gran interés ecológico y paisajístico y, entre otros aspectos destacables, alberga especies raras y únicas de la flora menorquina, como es el caso de la Cymbalaria fragilis i Viola stolonifera (viola boscana). Esta riqueza, junto con el valor histórico y social del camino, le confiere un gran atractivo.

El Camí Reial

El Camí Reial –«camino real» en castellano– era conocido también como Camí Vell –«camino viejo o antiguo»– y fue en tiempos antiguos la principal vía de comunicación entre Maó y Ciutadella. Se cree que su origen se remonta a la Edad Media, aunque no se descarta su condición originaria de vía romana.

Gracias a la implicación de un grupo de voluntarios, fue posible recuperar el tramo de 3,5 km entre el pueblo de Ferreries y el barranco de Algendar. Actualmente se conserva y mantiene limpio gracias a la colaboración de algunas entidades del pueblo.

A lo largo del trayecto encontraremos diferentes elementos de interés como la Cova Reial, una cavidad probablemente utilizada en época prehistórica, o el Pou de sa Perdiu Blanca, además de una densa vegetación boscosa de acebuches, matas y encinas con un elevado valor paisajístico.

Merece la pena alargar la excursión y adentrarse en el barranco de Algendar por el Pas d’en Revull y enlazar más adelante con el Camí Vell que llega hasta Ciutadella.

El barranco de Algendar en la prehistoria

Las paredes del barranco de Algendar albergan cavidades naturales de gran valor geológico y arqueológico. Es el caso de la Cova des Càrritx o la Cova Murada, utilizadas en época talayótica como lugar de enterramiento.

Las excavaciones realizadas hasta la fecha han sacado a la luz una valiosa información sobre hábitos y costumbres de los pobladores primitivos, especialmente los relacionados con la muerte y los rituales funerarios. Muchos de los objetos hallados en estos yacimientos se encuentran custodiados en el Museu de Menorca y en el Museu Municipal de Ciutadella.

Cómo llegar al barranco de Algendar

Llegar al barranco de Algendar es fácil. Desde Maó, pasado Ferreries, nos encontraremos con una rotonda en la que convergen la Me-1 y la Me-22, que lleva a Cala Galdana –si nos desplazamos desde Ciutadella, la rotonda la encontraremos justo antes del inicio del pueblo. En esta misma rotonda, un señal nos indica la entrada al barranco por Es Canaló. Solo hay que dejar el coche en el aparcamiento habilitado y empezar a caminar.

Como hemos explicado antes, también se puede llegar a pie por el Camí Reial. En este caso, merece la pena dejar el coche en el mismo pueblo de Ferreries, bajar andando hasta la Me-22, cruzarla con atención e iniciar una caminata de 3,5 km que nos llevará hasta Es Canaló o, un poco antes, hasta el Pas d’en Revull.