Macarella y Macarelleta

Las calas de Macarella y Macarelleta son, probablemente, las dos playas más conocidas y admiradas de Menorca. Por ello, durante los meses de verano suelen tener un alto grado de ocupación.

Se trata de dos playas vírgenes de aguas de color azul turquesa y arena blanca, rodeadas de acantilados llenos de pinos que miran hacia el mar, conformando una estampa idílica.

Junto con las playas de Son Saura, Es Talaier, Turqueta y Mitjana forman un conjunto de playas vírgenes de gran belleza, que se han salvado del desarrollo urbanístico.

La primera playa que nos encontramos es Macarella, la más grande, que cuenta con un pinar en la parte posterior que acoge un restaurante. En los acantilados que la rodean podremos observar algunas cuevas, que tradicionalmente se han empleado para pasar el fin de semana.

Macarelleta es más pequeña y está considerada como una playa nudista. Para llegar, tendremos que seguir el camino que pasa por el acantilado que separa las dos playas.

¿Cómo llegar a Macarella y Macarelleta?

A partir de julio, el acceso a las calas de Macarella y Macarelleta sólo puede hacerse mediante un servicio de bus público que sale desde Ciutadella. Se trata de un servicio de alta frecuencia, que permite ahorrar atascos y preservar el entorno. El bus pasa cada 40 minutos, de lunes a domingo, incluidos los días festivos.

En temporada baja, sí podemos acceder a las calas con nuestro vehículo. Desde Ciutadella, tendremos que coger la ronda sur (RC-2) y desviarnos por el camino de Sant Joan de Missa, siguiendo las indicaciones. El aparcamiento nos deja a 15 minutos de la playa.